El último fin de semana de 2025 quedará registrado como uno de los más desafiantes para la infraestructura de transporte en los Estados Unidos. Lo que comenzó como una serie de nevadas estacionales se ha intensificado hasta convertirse en una crisis logística de gran escala. Entre el viernes por la noche y ayer, se reportaron más de 1.500 vuelos cancelados, afectando principalmente a los nodos neurálgicos del noreste y la región de los Grandes Lagos. Los aeropuertos internacionales de Newark, JFK y LaGuardia se convirtieron en escenarios de incertidumbre para miles de familias que intentaban regresar a sus hogares o llegar a sus destinos para las celebraciones de Año Nuevo.

Consecuencias

La tormenta dejó una huella blanca significativa. En Nueva York, las acumulaciones alcanzaron los 10,2 centímetros, mientras que en sectores de Long Island la cifra superó los 15 centímetros. El impacto fue aún mayor en las zonas montañosas de los Catskills, donde los registros llegaron a los 25 centímetros. A pesar de que el Servicio Meteorológico Nacional indicó que la tormenta comenzó a amainar hacia el mediodía de ayer, el alivio fue sólo temporal debido a la inminente llegada de un fenómeno meteorológico mucho más agresivo para hoy.

Las autoridades estatales han tomado medidas drásticas. La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, y su homóloga interina en Nueva Jersey, Tahesha Way, declararon estados de emergencia para proteger a la población y facilitar el trabajo de las cuadrillas de limpieza. La advertencia es unánime: las carreteras presentan condiciones peligrosas debido al hielo y la acumulación de nieve, y existe un riesgo real de cortes de energía por la caída de árboles sobre las líneas eléctricas. En Times Square, el contraste era evidente; mientras los trabajadores municipales luchaban con palas y sopladores para despejar las veredas, turistas de lugares más cálidos como Carolina del Norte y Virginia Occidental expresaban su asombro ante la belleza de la ciudad cubierta de nieve, a pesar del frío cortante y los retrasos.

Pronóstico

Sin embargo, lo más preocupante es el pronóstico para las próximas horas. Un frente ártico extremadamente gélido, conocido como “Blue Norther”, está descendiendo rápidamente desde Canadá hacia las llanuras centrales y del sur. En estados como Montana, se espera que la sensación térmica se desplome hasta los -34°, niveles que pueden causar congelación en minutos. Simultáneamente, el alto medio oeste se prepara para condiciones de ventisca o blizzard. En Minnesota, se esperan hasta 30 centímetros de nieve con vientos tan intensos que reducirán la visibilidad a niveles críticos.

El fenómeno no discrimina regiones. Incluso en el sur del país, donde el fin de semana comenzó con temperaturas récord de 26°, se espera un descenso brusco en cuestión de minutos con la llegada del frente frío, provocando tormentas eléctricas severas. Por otro lado, la costa oeste disfruta de un respiro soleado tras días de lluvia, aunque con vientos de Santa Ana en California.

En Suecia

Dos personas murieron ayer en Suecia, informaron las autoridades, mientras una tormenta que dejó a miles de personas sin electricidad azota Noruega, Suecia y Finlandia.

El Instituto Meteorológico e Hidrológico de Suecia emitió alertas por fuertes vientos en amplias zonas de la mitad norte del país, a medida que la tormenta Johannes impactaba el territorio.

Se reportó una víctima mortal cerca de la estación de esquí de Kungsberget, en el centro de Suecia.

“Debido a la tormenta, un árbol cayó sobre un hombre”, dijo Mats Lann, de la policía de Gävleborg, añadiendo que la víctima fue trasladada al hospital pero murió a causa de sus heridas.

Más al norte, el proveedor regional de electricidad Hemab declaró que uno de sus empleados también había fallecido en un accidente “sobre el terreno”.

Según la cadena de televisión SVT, también fue a causa de un árbol arrancado por la violenta tormenta.

Según la radiodifusora pública finlandesa Yle, más de 120.000 hogares en Finlandia se quedaron sin electricidad, siendo la parte occidental del país la más afectada.

La agencia de noticias sueca TT informó de que más de 40.000 hogares suecos también se quedaron sin electricidad.

El tráfico en el aeropuerto de Kittilä, en el norte de Finlandia, tuvo que ser suspendido después de que un avión de pasajeros y una aeronave más pequeña se salieran de pista debido a los fuertes vientos, informaron medios finlandeses, aunque no se registraron heridos.